Inicio › Foros › LITERATURA Y ENSAYO › CONTRA-ACOSO › 137. Combates ideológicos, foros y tertulias
- Este debate tiene 0 respuestas, 1 mensaje y ha sido actualizado por última vez el hace 2 semanas, 4 días por Jason Aldrey.
-
AutorEntradas
-
Jason AldreySuperadministrador
137. COMBATES IDEOLÓGICOS, FOROS Y TERTULIAS
[Persona simple que sólo cree en los de su bando y en los medios de comunicación de su ideología]
«Todos los debates son justos, cada cual da su opinión. Si van a publicidad es para ganar dinero con anuncios, y si se interrumpen es para decir cosas interesantes. Esa teoría de la conspiración es una fantasías».
Primero de todo, ¿quién modera ese entorno? La ideología de los que moderan el entorno o patrocinan el encuentro, será impuesta indirectamente para perjudicar las ideologías opuestas. Mediante argucias y ataques de autoridad o desvío de la atención por parte de los moderadores, o con impresiones meméticas, o interrumpiendo o yendo a publicidad cuando el rival dice algo interesante, rompiéndole el estímulo. Cuando esto sucede no hay que participar en el debate, hay que destruir y denunciar la manipulación de los organizadores. No se les reclama porque no van a ser justos, sería como pedirle justicia a la madre de tu agresor. Casi siempre va a dictaminar a favor de su hijo agresor, y te golpearán por segunda vez.
En el caso de que haya cierto respeto ideológico y verdadero interés por el entendimiento, o por lo menos por hacerse entender, se participará aportando documentación oficial y citas lo más fidedignas posibles. Si se dedican a atacar a las personas –argumentos “ad hominem”- en lugar de argumentar los razonamientos, hay que hacer lo mismo, destruyendo ingeniosamente la imagen pública de los oponentes, procurando no caer en ilegalidades. Marcar el gesto, pero que se note. Adoptar posturas de desprecio ante las tergiversaciones ajenas, negarlas todas, y solicitar que vuelvan a poner los audios o vídeos de lo que se malinterpreta, o los textos escritos, para verificar la corrección de las interpretaciones. Porque suelen sesgar nuestras palabras, recortarlas e interpretarlas de modos retorcidos, dándoles un sentido completamente distinto al que hablamos. Son unos expertos de la retórica y de los sofismas, lógicas destructivas.
Y lo más básico de todo. Si en un debate no hay lugar para la razón y el respeto, es el momento de dejar la razón y el respeto de un lado. Coger y marcharse, y activar un protocolo de acoso a los integrantes y responsables de esa agresión social a nuestro respecto, destruyéndolos a ellos y a los que los apoyan. El mayor error de la gente buena no es la bondad, sino la cobardía, la ignorancia, y la facilidad con la que se someten a la esclavitud y dominio, con una ausencia total de autosacrificio para hacer lo que se debe hacer, pagando el precio que haya que pagar. Pero con astucia.
-
AutorEntradas