UN DOTADO QUE HACE COU, COU Y COU

Todo ese lío afectivo y emocional se notaba en lo personal y en los estudios. No estudiaba. Aprobaba porque atendía en clase y las cosas se me quedaban en la memoria para el examen. Pero al llegar a COU, el curso de orientación universitaria, que llamamos ahora 2º de Bachillerato, no se daba toda la materia en el aula, sino que había que estudiar en casa. Y repetí COU. Y lo repetí otra vez más. No iba ni siquiera a las clases. Pasé unos dos meses sin asistir a clase. De tal modo que cuando volví, casi no me quedaban faltas de asistencia disponibles. Cada tres retrasos me ponían una falta. Y entre faltas y retrasos, llegó el último día en que me pusieron un retraso, y ya tenía los dos últimos acumulados. Y le dije al profesor que no me lo pusiera, pero el replicó que había que ser puntual. No le quise explicar que ese retraso suponía mi expulsión del instituto aunque con derecho a exámenes, porque el profesor tenía toda la razón. Era culpa mía, o de mis circunstancias, haber faltado todas las otras faltas a lo largo del curso. Eso fue en el segundo COU.

Entonces me puse serio y dediqué el tiempo de las mañanas a estudiar. El profesor de literatura me dijo que me tenían que haber expulsado antes para espabilar y ponerme a estudiar, y le doy la razón. Entre junio y septiembre estudiando por libre saqué cinco de las ocho materias. Lo cual quería decir que para el tercer COU sólo tenía tres materias. En ese instante no tenía intención de ir a la universidad, no me veía con fuerzas ni apoyos, y estaba haciendo un curso de electricidad y autómatas por las tardes. Así que hice COU por orgullo, aunque luego me serviría para acceder al ciclo de informática. El rato que había entre clases iba al gimnasio de Elviña. Fue un año maravilloso, el mejor de mi vida hasta aquel momento. Saqué las tres materias, aprobé por fin COU, estaba hecho una mula del gimnasio, quería dedicarme a la rama práctica de la ingeniería de automatismos, y me apartara de todas mis malas amistades que me estaban estorbando, consumiendo mi tiempo, y haciendo de mi vida su pasatiempo.